Título: Drácula, La Leyenda Jamás Contada
Título Original: Dracula Untold
Año: 2014
Director: Gary Shore
Guión: Matt Sazama, Burk Sharpless
Música: Ramin Djawadi
Fotografía: John Schwartzman
Reparto: Luke Evans, Sarah Gadon, Dominic Cooper, Zach McGowan, Samantha Barks, Thor Kristjansson, Art Parkinson
Una historia original sobre Vlad Tepes o Vlad el Empalador, el príncipe rumano en el que se inspiró Bram Stoker para escribir su célebre novela (1897) y crear al vampiro más famoso de todos los tiempos. La película narra la trágica vida de Vlad, qué dilemas tuvo que afrontar y cómo se convirtió en un vampiro.
Aprovechando la fiesta del cine que tuvo lugar en el mes de octubre, y, con la escasa cartelera interesante para disfrutar de tres días de cine a precio de lujo, decidimos entrar a ver Drácula, la única película que teníamos ganas de ver de verdad, aunque la critica no la ponía en muy buena posición.
Drácula, La Leyenda Jamás Contada, sigue a Vlad III en la época de su vida en la que es conocido como Príncipe de Transilvania y Vlad el Empalador, un soldado que fue criado por los turcos desde su infancia, raptado y alejado de su familia para cumplir con su deber para con el ejército otomano, y que con el tiempo y tras numerosas batallas pasó a ser conocido por su destreza y su forma de acabar con los soldados enemigos, empalando. Durante una misión, Vlad y sus hombres se adentran en la Muela Rota, la cima de una montaña que oculta a una criatura mística con sed de sangre, siendo él el único superviviente de la empresa.
Más tarde, durante la celebración de los años de paz en el reino, el sultán de los turcos le ordena al Príncipe de Transilvania que ofrezca a la armada turca 1000 niños, incluido su hijo, a lo que Vlad se negará, iniciando así una guerra contra su raza adoptiva, una guerra imposible de ganar. Es por ello que, en un intento desesperado, Vlad vuelve a la Muela Rota en busca de poder para destruir a su enemigo.
Son tantas las películas que a lo largo de los años han retratado al eterno y mitológico Conde Drácula que es difícil lanzar una nueva producción capaz de reconstruir y mejorar la historia del vampiro más clásico de la historia del cine y la literatura. Pero con Drácula, La Leyenda Jamás Contada se da un pequeño giro de tuerca y se fusiona a este clásico personaje con la historia de Vlad el Empalador, dando como resultado una película con una trama refrescante y, como bien dice su título, jamás contada.
Se nos relata la vida de un Vlad III víctima de su infancia, alejado de la protección de su familia y con un padre que aceptó venderlo al ejército turco, convertido en un padre de familia cuyo único deseo es mantener a salvo a los suyos. De cruel y sanguinario en el campo de batalla, donde se le conoce por su habilidad y técnica de empalar a sus víctimas, a marido, padre y príncipe dispuesto a lo que sea por mantener a sus seres queridos a salvo. Vemos las dos caras de una misma moneda, complementadas cien por cien y con una razón de ser a una de sus caras más terroríficas: el bienestar de su familia y su pueblo. Pese a que la leyenda de Vlad el Empalador lo sitúen como un monstruo cruel y sanguinario ajeno de corazón que se regodea entre los hombres que han muerto bajo sus manos, en esta película se han centrado en humanizar esa parte de él, en darle una razón de ser a su crueldad en el campo de batalla, una razón de ser inclinada a destruir y acabar con el enemigo con el único fin de impedir que la guerra llegue a sus tierras y a su gente. Toda una maldad inclinada a la protección y salvaguarda de Transilvania, razón por la cual no dudará en buscar asistencia del vampiro oculto en la montaña para llegar a un trato con él, adquiriendo así la fuerza de cien hombres, la velocidad de una estrella fugaz y el poder de derrotar al enemigo, pero a cambio sufrirá una sed insaciable de sangre humana a la que tratará de resistir con todas sus fuerzas.
La verdad es que esta premisa me ha gustado muchísimo y he disfrutado ese apartado de la cinta. No es una película sobre vampiros por excelencia, y tampoco se trata de una película de terror, sino de una historia de batallas y guerras donde las decisiones de un hombre marcarán el curso de su historia y su existencia.
Luke Evans es un actorazo y plasma maravillosamente la esencia de Vlad. Sus primeros planos son increíbles y he disfrutado mucho más de la película gracia a su papel y la fortaleza que le da al personaje. Luke Evans acarrea con todo el peso de la película, ocupando los demás actores un papel secundario y una interpretación aceptable pero no destacable.
Los efectos visuales están logradísimos. Desde el segundo uno de la película me quedé maravillada con las escenas a cámara lenta y ese efecto 3D sin necesidad de gafas especiales que se aprecia en cada toma de batalla.
Como punto negativo tengo que destacar una serie de gazapos criminales de los que nos dimos cuenta mi amiga y yo. En una película de vampiros que se te pase por alto una escena donde la luz del sol incide directamente sobre Vlad el Empalador y que no haya reacción ninguna ante tal hecho una vez que está bajo el influjo de la sangre del vampiro de la montaña, y tratándose de una producción tan grande, me sorprende bastante que en el montaje final no se hayan percatado o hayan modificado esa escena en concreto porque, me vuelvo a repetir, es un cantazo del copón.
En resumen, Drácula La Leyenda Jamás Contada no es una de las muchas películas de terror que recrean la leyenda del clásico vampiro, sino una película que aborda de forma diferente los orígenes de Drácula, donde las batallas y las decisiones de un hombre dispuesto a todo por proteger a su pueblo y a su familia son el punto de partida del mítico vampiro. Una película cargada de acción, con efectos especiales increíbles y con un Luke Evans que borda el papel. No es la mejor producción sobre Drácula pero sí una entretenida, diferente y original.
Yo tambien note lo de la luz que le da ! jajjaa fue un desliz demasiado grave debo decir, pero el resto de la peli estuvo bastante bien, jajaja
ResponderEliminarQue lindo que te haya gustado :)
Besos !
Uy, pues yo del gazapo no me di cuenta, jajaja. Pero me fijaré la próxima vez que la vea ;) ¡Me encantó!
ResponderEliminarUn besote!!
Estoy de acuerdo contigo que Dracula: La historia jamás contada es una película palomera, con excelentes efectos especiales y entretenida en ciertos momentos
ResponderEliminar