Crítica: Star Trek, En La Oscuridad

Título: Star Trek, En La Oscuridad

Título original: Star Trek Into Darkness (Star Trek 2)

Año: 2013

Director: J.J. Abrams

Guión: Alex Kurtzman, Damon Lindelof, Roberto Orci (Serie original: Gene Roddenberry)

Música: Michael Giacchino

Fotografía: Dan Mindel

Reparto: Chris Pine, Zachary Quinto, Zoe Saldana, Benedict Cumberbatch, Karl Urban, Simon Pegg, Alice Eve, Bruce Greenwood, Peter Weller, Anton Yelchin, John Cho, Noel Clarke

Cuando a la tripulación de la nave Enterprise le ordenan que regrese a casa, descubren una imparable y terrorífica fuerza que, desde dentro de su organización, ha hecho saltar por los aires la flota y todo lo que esta representa, sumiendo al mundo en una profunda crisis. Con un asunto personal que resolver, el capitán Kirk encabeza una incursión a un planeta en guerra para capturar a un hombre que es un arma de destrucción masiva. A medida que nuestros héroes se van sumergiendo en una épica partida de ajedrez a vida o muerte, el amor se verá puesto a prueba, las amistades se romperán, y habrá que hacer ciertos sacrificios por la única familia que le queda a Kirk: su tripulación. 

Soy algo nueva en esto del mundo Star Trek. No me considero fan de la franquicia porque no he visto ninguna serie original. Sus comienzos en pantalla fueron muchísimo antes de que yo viniera al mundo y sus continuaciones me pillaban aún en pañales xD.
Por eso mi visionado se reduce a las dos últimas adaptaciones en cines que se han realizado y lo cierto que es me han sorprendido bastante, más esta segunda película que la primera de 2009, y la verdad es que eso es un poco raro en cuestiones de películas y sus segundas partes. Las segundas partes nunca fueron buenas... hasta que llegó J.J. Abrams con Star Trek y puso en tela de juicio ese dicho tan señero xDD.

Las presentaciones ya se hicieron en la película del 2009 y ahora con 'Star Trek, En La Oscuridad' se deja a un lado los formalismos y se va al grano. Ya conocemos al Enterprise, la tripulación, la historia previa de Kirk y Spock y cómo acabaron a bordo del Enterprise para derrotar a Nero, y por ello se deja a un lado el relleno y se nos presenta inmediatamente la acción y la nueva amenaza.

En la película se disfruta de un ritmo trepidante, con situaciones de acción por doquier, con más movimientos y aventuras al borde la muerte. Todo ello, junto con el magnífico nivel visual y el derroche de efectos especiales, hace imposible que despeguemos la vista de la pantalla ni siquiera para comprobar si el cubo de las palomitas ya está vacío por temor a perdernos el más mínimo detalle de una sucesión de escenarios que nos dejarán con la boca abierta.

Y llegando a los actores, tengo que elogiar al malo de turno, Benedict Cumberbatch, cuya interpretación me ha parecido la mejor de la película. Ya conocía a este actor por su papel como Sherlock Holmes en la serie británica de la BBC 'Sherlock', y el cambio de registro que se evidencia de un papel a otro me ha dejado a cuadros. Me ha parecido un villano bastante creíble, malévolo e inmejorable; incluso sus diálogos cargados de amenazas, frialdad, engaño, seguridad y manipulación (llevando a los protagonistas incluso a creer en sus palabras para conseguir sus propósitos) han hecho de Khan un villano al que recordar en la franquicia de Star Trek.

Chris Pine sigue destacando por su carisma interpretando a James Kirk, y Zachary Quinto me parece un Spock bastante acertado (hablando desde mi desconocimiento en la interpretación de este personaje por otros actores a lo largo de más de 30 años de Star Trek), su personalidad seria y fría ha hecho que suelte alguna que otra risa en más de una ocasión... Los vulcanos siempre tan racionales y acordes a la lógica que no pillan más de una indirecta muy directa xD.

Como he dicho al principio, hasta hace 4 años sólo conocía el nombre de Star Trek porque era un franquicia importante y que llevaba años forjándose y con millones de fans por todo el mundo, pero más allá de eso, no sabía ni de qué trataba y por qué gustaba tanto. Eso fue hasta que vi el reinicio cinematográfico del 2009 y acabé enganchada al despliegue de efectos especiales, de originalidad y de ciencia ficción que rodea al mundo de Star Trek. No habré visto las producciones anteriores a ese año, pero sí puedo decir que desde entonces hay una nueva seguidora de las aventuras del Enterprise y su tripulación.

En conclusión, una película que supera con creces a su primera entrega y que mantiene un perfecto equilibrio entre acción, tensión y risas, con un villano memorable y unas escenas de acción que quitarán el hipo. Es ciencia ficción pura, dura y directa. J.J. Abrams sigue sorprendiendo.