Reseña: 'La Desaparición de Annie Thorne' de C.J. Tudor

Título: La Desaparición de Annie Thorne

Autora: C. J. Tudor

Editorial: Plaza & Janés

Páginas: 368

ISBN: 9788401021923

Entonces: Annie desapareció una noche. Desapareció de su propia cama sin dejar rastro. Todos pensamos lo peor. De repente, como un milagro, tras cuarenta y ocho horas, volvió, pero no podía, o no quería, contar lo que le había ocurrido. Algo le pasó a mi hermana, aunque ella no pueda explicarlo. Solo sé que cuando volvió ya no era la misma. No era mi Annie. Soy incapaz de admitir, incluso para mí mismo, que a veces mi hermana me aterroriza.

Ahora: Recibí este correo hace casi dos meses. Estuve a punto de borrarlo, pero decidí abrirlo: Sé qué le pasó a tu hermana. Y está ocurriendo de nuevo...

Hace cosa de un año conocí la pluma de esta autora a raíz de su primera novela, El Hombre de Tiza, cuya reseña podéis encontrar en el blog. Fue un thriller que me enganchó y sorprendió mucho. Por ello, en cuanto supe que Plaza & Janés volvía a apostar por una nueva novela de la autora, no dudé en lanzarme a su lectura.

En La Desaparición de Annie Thorne conocemos a Joe Thorne, el hermano mayor de Annie, una niña que desapareció veinticinco años atrás y que volvió a reaparecer dos días después, perdiendo finalmente la vida en un accidente de tráfico junto a su padre, y del cual Joe salió malherido. Nada sabemos de lo que le ocurrió a Annie durante los días que estuvo desaparecida. Lo que sí sabemos es que no regresó siendo ella misma y que, según un anónimo que Joe recibe en la actualidad: "Lo que le pasó a tu hermana está volviendo a suceder". Y así, Joe decide regresar a Arnhill, su pueblo natal, aceptando un puesto como profesor en el instituto y alojándose en la casa donde hace poco una mujer y su hijo fueron encontrados muertos con signos de violencia. Las habladurías del pueblo apuntan a que la mujer estaba desquiciada y acabó primero con su hijo para luego quitarse ella misma la vida. Con todo, Joe no está convencido del todo de que esa sea la verdad de los hechos y de cómo ocurrieron. Joe sospecha que hay algo más detrás y que guarda relación con la mina abandonada y con lo que encontró años atrás con su grupo de amigos, antes de que Annie desapareciera y empezaran a suceder cosas extrañas... ¿Será Joe capaz de averiguar lo que ocurre de verdad en el pueblo? ¿Cómo le sentará a sus viejos amigos que regrese tras veinticinco años al pueblo para indagar en el pasado? ¿Qué secretos se ocultan en Arnhill?

La trama se desarrolla de tal forma que el lector queda inmediatamente hipnotizado y dándole mil vueltas a todo. Cada página va aumentando la intriga y la incertidumbre, haciéndote viajar de una teoría a otra, pensando en personas implicadas, en posibles hechos sobrenaturales, en las misteriosas notas y amenazas que recibe Joe, etc. La duda e incertidumbre oscila entre lo que le ocurrió a Annie veinticinco años atrás, y que vamos descubriendo a raíz de los capítulos ambientados en el pasado, cuando tuvo lugar la desaparición; y entre los secretos que ocultan los personajes que, en la actualidad, tratan de vivir en Arnhill como si nada hubiera pasado, dejando atrás un recuerdo y unos hechos que Joe se niega a olvidar. Con el paso de las páginas la trama se va volviendo más compleja, hasta el punto de terminar con un final totalmente inesperado y con un epílogo que deja al lector con la boca aún más desencajada.

En cuanto a los personajes, tengo que hacer mención a la habilidad de la autora de crear personalidades complejas y muy marcadas por las experiencias pasadas que hacen que cada uno parezca incluso más sospechoso que el anterior.
Todos ocultan secretos, todos han cometido algún que otro acto que les pone en el punto de mira, y nadie se libra de la sospecha o el temor de que el pasado les pille por sorpresa. La verdad es que el algo que me gusta mucho en este tipo de novelas donde no sabes por dónde pueden ir los tiros porque, de primeras, parece un thriller común sobre asesinatos, desapariciones y muertes, pero, conforme se avanza en la lectura, vas sospechando que hay algo más, que no todo se puede explicar de forma lógica y racional. Y C.J. Tudor juega muy bien con esa baza hasta el final, dando como resultado un thriller de lo más completo y emocionante. Todo es posible y la tensión se mantiene hasta el último momento.

Por otro lado, también destacar la ambientación. Arnhill es un pequeño pueblo con sus características comunes a cualquier otro de la misma categoría: un pequeños pueblo donde todo el mundo se conoce y las noticias vuelan rápido. Pero, por encima de ella, Arnhill destaca por un halo de misterio en torno a determinados espacios y lugares que parecen malditos. Además, C.J. Tudor no se corta un pelo en las descripciones de escenarios grotescos y que revuelven las tripas, por lo que no recomiendo la lectura a lectores con estómagos sensibles.

Por último, en cuanto al final de la historia, podemos decir que nos encontramos con dos vertientes, dos finales que zanjan las dos patas importantes de la trama: la desaparición de Annie y los hechos que suceden en el presente y que giran en torno a Joe. Cada explicación va por un camino totalmente opuesto y me ha dejado de lo más ojiplática y extrañada, en el buen sentido, sobre todo con el epílogo que, sin duda alguna, no dejará indiferente a nadie.

En resumen, 'La Desaparición de Annie Thorne' es una novela llena de misterio que atrapa al lector desde la primera página tratando de descubrir no solo la verdad sobre la desaparición de Annie veinticinco años atrás, sino también la implicación de ese suceso en el presente. Un thriller que tiene un poco de todo: suspense, terror, muertes, asesinatos, venganzas... Un cóctel perfecto para quien quiera disfrutar de una novela que sabe jugar con el lector, haciéndole dudar y barajar mil teorías sin poder llegar nunca a adivinar previamente lo que ocurre. El capítulo final y, sobre todo, el epílogo, sorprenderán, y mucho.

- Gracias a la editorial por el ejemplar -