Autora: Megan Goldin
Traductor: Mauricio Bach Juncadella
Editorial: Grijalbo
Páginas: 384
ISBN: 9788425358128
Cuatro ejecutivos acuden a una cita inesperada en un rascacielos que todavía no se ha inaugurado. Al parecer se trata de un ejercicio de team building que se parece mucho a un juego de Escape room. Pero cuando las puertas del ascensor se cierran y las luces se apagan, todos adivinan que no se enfrentan a una simple prueba. Encerrados y a oscuras, los cuatro deben dejar de lado antiguas rivalidades y trabajar juntos para resolver las inquietantes pistas que les permitirán salir. A medida que el tiempo pasa empiezan a aflorar los secretos más sórdidos del equipo, y cada vez es más evidente que todos tendrán que pagar un precio muy alto por sus siniestras maniobras para conseguir el éxito profesional. Los ánimos empiezan a flaquear y las pistas se vuelven más peligrosas, está claro que la prueba es a vida o muerte.
Encerrados es un thriller psicológico sobre cuatro compañeros de trabajo que se quedan encerrados un viernes por la tarde en un ascensor del edificio de oficinas en el que trabajan. Todos han recibido un mensaje que les cita para lo que sospechan será una entrevista para ocupar un puesto privilegiado que ha quedado vacante recientemente en la empresa. Sin embargo, Sam, Vincent, Jules y Sylvie se quedan encerrados en el ascensor nada más cerrarse sus puertas. Se encuentran ante un Escape Room, o al menos eso es lo que piensan en un primer momento. Creen que los altos cargos tratan de realizar un ejercicio de formación de equipos para determinar quién es el más adecuado para el ascenso. Creen que solo necesitan completar el desafío y que podrán irse, pero las cosas no salen según lo planeado. Lo que parecía un juego inofensivo se vuelve mucho más intenso, angustioso y personal a medida que los participantes luchan por salir con vida.
Es una novela adictiva desde el minuto uno. Sabes que hay algo turbio desde el principio y que el objetivo del encierro en el ascensor no está orientador a algún beneficio o privilegio empresarial, sino a algo que involucra a los participantes, y que la mano misteriosa y maestra que mueve los hilos está tratando de demostrar y que admitan la culpabilidad.
Los personajes viven y se desviven por su trabajo en una empresa financiera de alto standing y que mueve infinidad de negocios y valores en bolsa. Se considera la más prestigiosa de Wallstreet y, como todo lo que se mueve en ese entorno de negocios, no es oro todo lo que reluce. Vamos conociendo a los personajes poco a poco en tercera persona del singular, salvo en el caso de Sara Hall, cuyos capítulos están narrados en primera persona del singular; y todos ellos son personas horribles, egoístas y con dobles raseros. Es lo más suculento de la trama porque se sabe de antemano que todos ocultan algo, que se mueven por el dinero y son capaces de pasar por encima de cualquier para conseguir el éxito. La pregunta del millón es: ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar? ¿Qué se lo que han hecho y les ha puesto en el punto de mira de quién controla los mandos del ascensor? Son personajes que encajan con los estereotipos de este mundillo financiero y no nos resulta para nada extraño imaginarnos que esta ficción podría ser claramente un caso real.
Además, no podemos olvidar el escenario en el que tiene lugar la mayor parte del desarrollo de la trama: un ascensor. Megan Goldin transmite bastante bien al lector las sensaciones de angustia y claustrofobia que persiguen a sus protagonistas. Cada uno sobrelleva la situación de permanecer encerrados en un espacio tan reducido como puede, tratando, al mismo tiempo, de resolver los enigmas de ese supuesto e inofensivo Escape Room en el que se encuentran, y que durará como máximo una hora. Todo comienza como un juego, como algo que han de superar a contrarreloj y en equipo para demostrar su valía dentro de la empresa y, por ende, el ascenso tan deseado y que acompaña un generoso aumento de sueldo. Pero, cuando pasa una hora, hora y media, dos horas, y siguen sin salir de allí, comienzan a sospechar que las pistas están relacionadas con un secreto que tienen en común, y que nadie acudirá pronto a su rescate. En el ascensor todo se intensifica y eso hace que la trama se vuelva más interesante y atractiva. Los nervios empiezan a florecer, la angustia se acrecienta, la sospecha y desconfianza hace mella entre ellos... Son personajes llenos de contradicciones y capas que se irán desvelando durante el tiempo que comparten entre esas cuatro paredes de metal.
Encerrados es también una novela que destaca por el detalle; hay aspectos de la narración y hechos a los que podemos no darle ninguna importancia pero que, con el paso de las páginas, descubriremos que son datos cruciales e importantes para entender y seguir la historia. Y, como ya mencionaba anteriormente, el trasfondo de la historia guarda mucho más de realidad que de ficción dentro del marco de los negocios y las grandes corporaciones que se mueven en el mundo de las finanzas. De hecho, justo cuando comencé la lectura de esta novela, comencé una miniserie llamada Devils, basada en otra novela, y que presenta también un entorno similar de corrupción dentro de financieras y empresa que juegan y manejan el dinero de sus clientes. Creo que gracias a que la lectura coincidió con esta serie, he sentido también más auténtica la red de secretos, mentiras, poder, engaños, manipulaciones, egoísmo, dinero, y un largo etcétera, que refleja la pluma de Megan Goldin, con un desenlace que se intuye casi desde el principio, pero que no deja de ser bueno.
En resumen, 'Encerrados' es un thriller adictivo, inteligente e interesante que refleja una cruda realidad dentro del mundo financiero y de las grandes corporaciones. El escenario es lo más original de la trama: el encierro en un ascensor; pero son los propios personajes y sus capas, que se van desvelando poco a poco, lo que hace de esta novela una lectura redonda. Una trama que te hace pensar lo ruin y cruel que puede llegar a ser el ser humano para conseguir el éxito en la vida.
- Gracias a la editorial por el ejemplar -
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