Reseña: 'La Nueva Vida de Bluebell Gadsby' de Natasha Farrant

Título: La Nueva Vida de Bluebell Gadsby

Autora: Natasha Farrant

Editorial: La Galera

Páginas: 285

ISBN: 9788424645809

Bluebell Gadsby nos cuenta su día a día a través de su diario personal y de la transcripción del vídeo amateur que está grabando. Tiene trece años, empieza a gustarle el chico que vive en la casa de al lado, se discute con su hermana mayor y se divierte mucho con las travesuras de sus hermanos menores, desearía tener más cerca a sus padres -siempre de viaje por motivos de trabajo-, recibe el apoyo de Zoran, el canguro, y echa de menos a Iris, su hermana gemela, que murió meses atrás.
Optimista, tierna, triste y divertida, La nueva vida de Bluebell Gadsby describe el barullo de sentimientos y emociones de una adolescente: el amor y el desengaño, la alegría, la tristeza, el calor y el cariño de sus hermanos, el dolor por la pérdida de su hermana y, sobre todo, las ganas de vivir. 

Con cámara en mano, Bluebell Gadsby nos cuenta su día a día. Es una chica de 13 años muy observadora, a la que le encanta plasmar toda sus experiencias de la vida a través del objetivo de una cámara, y es por ello que en la novela se alternan capítulos a modo de guión cinematográfico cuando Bluebell se coloca detrás de su cámara y comienza a grabar las peripecias y problemas de su familia, con las entradas a modo de diario que continúan contando lo que le ha sido imposible capturar en forma de vídeo.

Su familia se encuentra desestructurada. Tras la muerte meses atrás de su hermana gemela Iris, sus padres se han volcado en sus respectivos trabajos y apenas paran por casa. De ahí que llegue a sus vidas Zoran, un joven alumno del padre de Bluebell que hará las funciones de canguro y persona adulta y madura que tendrá que lidiar con dos adolescentes insufribles, Bluebell y su hermana Flora, y dos renacuajos demasiado traviesos, Twig y Jes.

Las entradas de Bluebell nos irán presentando su vida cotidiana, sus problemas en el colegio, su primer flechazo, así como la falta de cariño que sienten los niños debido a la ausencia de sus padres en casa.

La historia me ha gustado y disgustado a partes iguales. Cuando supe del libro me esperaba encontrarme con otra historia diferente o llevada de una forma más profunda, pero al final ha resultado ser una lectura muy light, dirigida a un público más bien infantil donde los problemas se reducen a rabietas, trastadas y algún que otro enfado entre hermanas y castigos por hacer lo que se les da la gana. El verdadero punto de la historia, y el que tiene mayor peso: la muerte de Iris, no adquiere protagonismo hasta avanzada la trama y es ahí donde se descubre el motivo de que cada uno, tanto padres como hijos, actúen de la forma que están actuando y no se sinceren los unos con los otros demostrando ser una familia unida y no un grupo de personas que conviven bajo el mismo techo y que poco más podrían tener en común.

Es una historia sencilla y con momentos en los cuales nos podemos sentir identificados pero la forma en la que se desarrolla y se explica todo no logra transmitir todo lo que una lectura así podría ser capaz de expresar. Todos hemos pasado por situaciones similares en nuestra vida: falta de cariño, soledad, incomprensión, frustración... pero las entradas de Bluebell y su pluma tan infantil y poco profunda no han logrado calar lo suficiente en mí.

Lo bueno es que desconocemos desde el principio qué le sucedió a Iris, cómo murió, y el ir averiguando poco a poco retazos de su muerte ayudan a prestar más atención a la lectura. Lástima que la autora no haya sabido plasmar bien las emociones de cada uno de los personajes y cómo se enfrentan a su modo a la pérdida que sufrieron meses atrás.

Blue es una chica de 13 años que vive pegada a su cámara de vídeo. Es tímida y su forma de expresarse es a través de un objetivo. Siente mucho pero dice poco. 

Su hermana Flora, de 16 años, me ha resultado un personaje muy insoportable. Es caprichosa y siempre quiere salirse con la suya. Si no lo consigue... ¡que arda Troya!

Los pequeñajos Twig y Jes son adorables. No paran de hacer travesuras y le dan mucha vida a la historia con su forma de ver el mundo, e incluso tienen algún que otro momento en el que demuestran saber más que un adulto, dando una lección a más de uno.

Joss, es el nieto de los vecinos de al lado, y el primer y único amigo de Blue, con el que se sincera y le cuenta cosas que jamás ha hablado con nadie. Al principio me pareció un chico estupendo, pero conforme avancé en la lectura mi opinión cambió por completo. No diré por qué.

El personaje que más me ha gustado ha sido el de Zoran, un chico de 25 años que de la noche a la mañana se ve a cargo de una familia que le traerá de cabeza pero que, con el tiempo, sabrá comprenderla y se ganará el cariño de todos y cada uno de ellos. Es el único que tiene los pies en la tierra y da un poco de razón en esa familia de locos donde los padres se desinteresan de sus hijos con la excusa de que están hasta arriba de trabajo, y los hijos viven haciendo lo que les da la gana sin una mano firme que les indique cuál es el camino correcto y les muestre el cariño y la cercanía que necesitan.

Como ya he dicho, la pluma de la autora es bastante sencilla y no profundiza apenas en lo que de verdad importa: los sentimientos y sensaciones de los personajes, así como el modo que tiene cada uno de superar la pérdida de Iris; pero tiene otros aspectos que sí me han gustado.

En resumen, 'La Nueva Vida de BlueBell Gadsby' queda finalmente como una lectura entretenida, para pasar una amena tarde de lectura sin complicaciones y disfrutando de un modo diferente de leer, alternando entradas de guión cinematográfico con fragmentos del diario personal de Bluebell. Una lectura dirigida más bien a un público infantil o a cualquier otro lector que busque una historia sin mucho bagaje.

- Gracias a La Galera por el ejemplar -