Cine: The Giver (El Dador de Recuerdos)

Título: El Dador de Recuerdos

Título original: The Giver

Año: 2014

Director: Phillip Noyce

Guión: Michael Mitnick (Novela: Lois Lowry)

Música: Marco Beltrami

Fotografía: Ross Emery

Reparto: Meryl Streep, Jeff Bridges, Brenton Thwaites, Alexander Skarsgård, Katie Holmes, Taylor Swift, Cameron Monaghan, Odeya Rush, Emma Tremblay

Adaptación de la novela de Lois Lowry. La historia de la novela narra en tercera persona los doce años de vida de un muchacho llamado Jonas. La sociedad en que vive ha eliminado el dolor y las disensiones al convertirse a la Monotonía y a la Igualdad, un plan que también ha erradicado la profundidad emocional de sus vidas. Jonas es seleccionado para desempeñar la Misión de "Receptor de la Memoria", la persona que almacena todas las memorias del tiempo anterior a la Monotonía, necesario en caso de que los jefes necesiten ayuda para tomar decisiones en las que nadie cuenta ya con experiencia. Cuando Jonas recibe los recuerdos del anterior receptor —el "Dador"—, descubre cuán superficial se había convertido la vida de su comunidad. 

El Dador de Recuerdos nos presenta un mundo distópico donde todo está dirigido por normas y pautas de comportamiento en una sociedad basada en la igualdad y el control. Jonás a la edad de 12 años es asignado como el nuevo Receptos de recuerdos, el único ser humano de la Comunidad capaz de sentir emociones, sensaciones y un sinfín de aspectos y caracterísicas tales como los colores, el frío y el calor... Cuando Jonás empieza a descubrir de la mano de su instructor y dador de recuerdos todo lo que la humanidad se ha perdido a consecuencia de la decisión tomada tiempo atrás por los jefes de la Comunidad, y lo engañada que vive en un mundo monocromático donde las sensaciones y los sentimientos son algo vetado de la propia esencia humana, no dudará en hacer uso de todos los recuerdos recibidos para poner fin a la mentira de una sociedad monótona y desprovista de emociones y memoria.

La premisa, al igual que en el libro que da vida a esta película, me parece increíble y tiene una fuerza de reflexión bastante alta. Sin recuerdos, sin conocimientos pasados, sin memoria histórica y, sobre todo, sin ser capaces de sentir y percibir con los cinco sentidos, las personas son meras criaturas autómatas que viven para hacer el día a día por pura rutina, porque están acostumbradas a hacerlo día sí y día también. Y eso es lo que se muestra en el argumento de la película: las emociones y vivencias hacen a cada persona, las nutre y les enseña como es la vida y todo lo que se forma alrededor. Hay cosas buenas y cosas malas y todas deben ser aprendidas sin distinción, pues es el conocimiento y los recuerdos lo que ayuda a progresar y avanzar.

En el libro, como ya comenté en su reseña, se dejan cosas en el aire y se dan explicaciones muy de pasada. En cambio, en la película este aspecto se lleva a cabo con más precisión y supongo que también tiene que ver que tengamos una visión más panorámica y extensa de lo que sucede de verdad en la Comunidad. En el libro todo estaba contado en primera persona por Jonás y eso reduce bastante los escenarios, algo que cambia en la cinta pues vemos la organización política, por llamarla de alguna manera; el poder de los Ancianos en la toma de decisiones y el control de todo lo que ocurre en el interior de la Comunidad, los amigos de Jonás... Tenemos una perspectiva más amplia y ayuda mucho más a captar la esencia del mensaje que se pretende transmitir.

El Dador y Jonás, son los personajes más destacables y me ha gustado mucho la complicidad y la relación que se muestra en pantalla. Al igual que Fiona, un personaje que en el libro pasó bastante desapercibido y que aquí cobra mayor peso, ya no solo por ese indicio de romance, sino por ayudar a Jonás en sun cometido y ser la primera en ver más allá cuando nadie más podía.

La madre de Jonás, interpretada por Katie Holmes me ha caído como el culo xD.

He hablado del indicio de romance. No hay un romance hecho y derecho y la cinta no gira en torno a él. Hay retazos en mi opinión necesarios porque forman parte del crecimiento en los recuerdos y emociones, y también en la caída progresiva de la venda de Fiona en concreto. Es muy mesurada y no quita protagonismo al quid principal: la importancia de los recuerdos en la vida.

Algo que sin duda tengo que destacar en el visionado de la cinta es la progresión en los colores. Cuando comenzamos a verla nos encontramos ante un escenario monocromo, en blanco y negro, claro reflejo de las carencias emocionales y perceptivas de la Comunidad; y a medida que Jonás va adquiriendo recuerdos, a medida que sus conocimientos aumentan, los escenarios se van tiñendo de colores, primero el rojo, luego el verde... hasta que todo se ve con su color real. Es un matiz que me ha fascinado. Hace que el espectador empatice de forma más directa con el mundo distópico que se nos plantea y la evolución que va sufriendo.
Por otro lado, también pensé que la película no se mantendría muy fiel al libro. De hecho, el tráiler parecía indicarlo así. Pero fuera de las escenas en las que Jonás no lleva el timón, se mantiene bastante en la línea de la novela.

En resumen, El Dador es una adaptación que nos ofrece un panorama más amplio que su versión en papel. Una bonita historia que te pondrá los pelos de punta en su escena final, que demuestra el poder de los recuerdos y lo necesario de las emociones en la vida humana.