Reseña: 'Show' de Javier Ruescas

Título: Show

Autor: Javier Ruescas

Editorial: Montena

Colección: Ellas

Trilogía: Play #2

Páginas: 480

ISBN: 9788415580560

Desde que se descubrió la verdad sobre Play Serafin, las vidas de Aarón y Leo no han vuelto a ser las mismas. Leo, de regreso en España, se presenta a todos los castings que surgen, sin demasiado éxito, mientras que su hermano pequeño, ahora solo en Nueva York, intenta hacerse con las riendas de una vida que ni quiere ni considera que le pertenezca.
La llegada a Develstar de una nueva artista, Zoe una virtuosa del violín le devolverá a Aarón la ilusión que creía perdida. Pero su aparición no es casual: Develstar quiere organizar un reality show como nunca antes se ha visto, en el que el público podrá conocer a fondo a sus estrellas. Y están dispuestos a hacer lo que sea para que Aarón participe en él...

Libros anteriores:
1. Play

Hace poco más de un año que leí Play, la primera parte de esta trilogía de Javier Ruescas, y prácticamente el mismo tiempo, o más, que los dos libros restantes llevan esperando ser leídos en la estantería. Entre una lectura y otra al final los he ido dejando pasar y el otro día me propuse ponerme con ellos antes de que la memoria empezara a crear lagunas y olvidase lo leído xD. La primera parte me resultó muy entretenida y marcada por la original de tratar un tema muy en tendencia en su momento, como era el de los canales de Youtube y la búsqueda de nuevos talentos musicales a través de ellos. Esta segunda parte, en cambio, no me ha dejado tan buen sabor de boca...

Nos situamos cuatro meses después con Aarón y Leo viviendo a raíz de las consecuencias de sus decisiones y sus actos. Leo ha regresado a España con más pena que gloria y trata de volver a hacer algo con su vida, conseguir una carrera y volver a situarse en el centro de atención televisivo. Aarón, por su parte, sigue en Develstar, aislado del mundo y con la soga al cuello por el contrato que le hicieron firmar en el que vendía prácticamente su alma. Vive encerrado en el edificio que la compañía le ha puesto a su disposición y sueña con el día en que vuelva a ser libre y pueda volver a manejar su vida a su antojo. Por suerte, esa posibilidad se presenta en forma de reality show donde una serie de artistas de la compañía Delvestar deberá competir y demostrar ser el mejor en diferentes dotes artísticas para así ganarse el favor del público y salir vencedor de True Stars, la única motivación de Aarón para formar parte de ese ridículo programa es que, si gana, quedará libre de Delvestar.

La historia sigue siendo narrada en primera persona desde la perspectiva de ambos hermanos, cuyas tramas volverán a confluir al comienzo del reality show pues Aarón participará como concursante y Leo como su asesor y defensor en las galas y fuera de la academia. De esta forma vemos las dos caras de una misma moneda en lo que a programas en vivo se refiere. Por un lado, experimentaremos de la mano de Aarón lo que es vivir encerrado en una casa siendo vigilado por cámaras las 24 horas del día, y junto a otro compañeros con los que tendrá que convivir y luchar por seguir semana tras semana en el concurso. Vamos, un auténtico Operación Triunfo con sus retos, ensayos y galas donde se muestra lo aprendido y se va eliminado y eligiendo al favorito de la semana. La verdad es que este apartado es bastante movido y hace muy amena la lectura, pero personalmente el tema de los realities es algo que no me fascina mucho y hasta cierto punto me crispa, por lo que no ha sido un punto de la trama que me haya atraído en demasía. Es un argumento entretenido, con sus conflictos y discordancias entre compañeros y con algún que otro momento romántico, pero no me ha llenado lo suficiente como para disfrutarlo plenamente. Lo mismo me ha ocurrido desde fuera, desde el punto de vista de Leo, cuya trama se ha reducido a asistir a galas y defender a su hermano a capa y espada. Salvo las escenas en las que charlaba por foros con cierto usuario que desvela su identidad hacia mitad de la novela, y los altibajos que sufre su relación con Sofía, lo demás no ha ido más allá de resultar entretenido y ver cómo marcha la vida ante las cámaras de alguien que entra a un programa para ser la cara visible y defensora de otra que no tiene los medios para defenderse por estar aislado en el interior de un recinto como concursante.

Aún así, la personalidad de Aarón me gusta mucho pues trata de no cambiar quién y cómo es por mucho que Develstar se empeñe en atarle en corto. Quizá su forma de reaccionar ante ciertos hechos no es la más adecuada, pero me ha gustado verle así: vulnerable y sin máscaras que puedan encubrir su verdadera personalidad. No le importa que le odien o le amen siempre y cuando sea por ser como es y no por fingir. Leo, por el contrario, sigue siendo un egocéntrico que se mueve por el famoseo y las cámaras. Hay veces que muestra una actitud protectora y con buenas intenciones para con su hermano, le defiende y lucha porque no se manche su imagen pero, al mismo tiempo, hay ocasiones en las que te hace cuestionar si no hay doble rasero en sus palabras y lo único que trata es de hallar un modo de relanzar su carrera. Pero bueno, es también algo positivo y apetitoso que podamos ver dos personalidades que enfrentan y "disfrutan" del estrellato de forma tan opuesta.

También se introducen nuevos personajes que dan mayor emoción a la vivencia dentro de True Stars y, en concreto, al apartado romántico, como es el caso de Zoe: una joven con mucho talento recién fichada por Develstar con la que Aarón congenia enseguida y que, pese a ser su contrincante en el programa, no puede evitar sentirla como una amiga, comprensiva y con la que disfruta de su compañía y sus bromas. Fuera del programa tendremos de nuevo a Sofía y a Emma, viejas caras conocidas del libro anterior.

Es general es una historia entretenida, sin muchas pretensiones que nos muestra la realidad de la fama y los reality shows con unos hermanos que son como el agua y el aceite. Mantiene la línea de la primera parte con capítulos breves y encabezados por fragmentos de canciones actuales y conocidas que dicen mucho de cada personaje y situación a la que tienen que hacer frente. El final es bastante cerrado pero queda ver qué nos depara Live.

En resumen, 'Show' es una historia entretenida, sin muchas pretensiones que nos muestra la realidad del famoseo y los reality shows con unos hermanos que son como el agua y el aceite: cómo les afecta las cámaras, la falta de intimidad, el momento fan... son cuestiones que quedan muy bien plasmadas aunque, personalmente, no es un tema que me atraiga mucho siendo tratado desde la perspectiva de los programas de talentos, rivalidades y convivencias.