Reseña: 'La Canción de Shannara' de Terry Brooks

Título: La Canción de Shannara

Autor: Terry Brooks

Trilogía: Las Crónicas de Shannara #3

Editorial: Oz editorial

Páginas: 536

ISBN: 978-84-16224-32-6

Antes de los albores de la humanidad, los demonios crearon un libro de magia negra llamado Ildatch. Lo llenaron con tanta esencia oscura que llegó a convertirse en un ente con vida propia, con conciencia de sí mismo. Durante años manipuló al Señor de los Brujos y a su ejército para intentar hacerse con el poder sobre las Cuatro Tierras, pero cuando Shea Ohmsford y sus amigos lo derrotaron, Ildatch pareció desaparecer. Pero ahora ha despertado de nuevo y acecha las Cuatro Tierras, pretende dirigir a sus espectros para provocar una guerra y destruir a la humanidad. Esclavizará a los gnomos y los enviarán contra los enanos. Y Allanon, el legendario druida protector de las Razas, tendrá que buscar de nuevo la ayuda en los descendientes de Shannara. Brin, la hija de Will Ohmsford, posee el poder mágico del Cantar. Ella cree que solo sirve para hacer que las plantas crezcan rápidamente o que las hojas de los árboles cambien de color pero Allanon le hará ver que no es así y que es el único medio que tienen para derrotar a Ildatch. Con ese don, podrán entrar en Maelmord, una jungla viviente en la nadie entra y vuelve para contarlo. Pero es necesario, deben destruir la fuente ancestral de maldad. El precio que tengan que pagar por hacerlo ya no importa.

Libros anteriores:
1. La Espada de Shannara
2. Las Piedras Élficas de Shannara

 

Hoy vengo a hablaros de la tercera parte de la saga de fantasía épica 'Las Crónicas de Shannara', que imagino muchos ya conoceréis por su adaptación en formato serie del canal MTV (y en la segunda temporada a través del canal SpikeTV), y si aún no la conocéis os animo a que le echéis un vistazo si os gusta este género tanto en cine como en literatura. Debo comenzar diciendo que los libros de esta primera trilogía, ya que la saga se compone de diferentes bloques de libros, se pueden leer de forma totalmente independientes entre sí. Todos los libros están basados en el mismo mundo de fantasía, en Shannara, pero están emplazados en territorios diferentes, en épocas que distan bastante entre sí, por lo que son pocos los personajes en común que aparecen en los tres libros dado ese lapso de tiempo tan amplio entre uno y otro. Los acontecimientos comunes se narran para poner en situación al lector, independientemente de si has leído las historias anteriores o no, por lo que en ningún momento nos perderemos durante la lectura o sentiremos que nos faltan datos o que algo se ha añadido por arte de magia. Terry Brooks lo explica todo a la perfección y desarrolla una tercera parte como si fuera un libro único y autoconclusivo, algo que me encanta porque el sólo hecho de comenzar una saga tan extensa pone al lector, o al menos en mi caso, en un estado de inquietud y esclavitud, por llamarlo de algún modo, a la hora de empezar una saga que no sabes cuándo va a terminar, como ya me pasó anteriormente con la saga de La Espada de la Verdad de Terry Goodkind (podéis leer su reseña aquí), una saga que es de lo mejorcito que he leído de fantasía épica hasta la fecha pero que me llevó 22 libros el terminarla. Pero bueno, eso es agua para otro costal y vayamos a lo que de verdad importa, que siempre me lío a escribir y no termino xD.

La Canción de Shannara, final de esta primera trilogía del universo de Shannara, cuenta como protagonistas con Jair y Brin, los hijos de Wil Ohmsford el cual, a su vez, fue protagonista de Las Piedras Élficas de Shannara, siendo su padre, Shea Ohmsford, el protagonista de La Espada de Shannara. Cada libro se centra en una generación distinta de la familia Ohmsford y, en esta ocasión, Jair y Brin Ohmsford deberán aceptar sus dones, asumir sus destinos y destruir el Ildatch, un libro de magia negra muy poderoso, para impedir que vuelva a resurgir todo el mal que dominó antaño y que amenaza con volver para destruir a toda la humanidad y el futuro de las Cuatro Tierras. Pero, para esa ardua misión no estarán solos y, como sucedió con sus antepasados, contarán con la ayuda de Allanon, un hechicero y aliado que una vez más necesita de la magia de la familia Ohmsford para evitar la destrucción del mundo. A raíz del uso que Wil hizo de las Piedras Élficas, Jair y Brin nacieron con dones mágicos: Jair con la habilidad de crear ilusiones y Brin con el poder de cambiar la realidad; dones conocidos como La Canción de los Deseos. 

Brin y Jair son personajes fuertes y decididos, buenos hermanos y muy unidos, algo que se demuestra a cada paso del camino, sobre todo cuando se descubre que el único interés de Allanon es para con Brin, ya que su poder es el único que puede destruir el libro. Sin embargo, Jair no está dispuesto a abandonar a su hermana, a dejarla sola ante el peligro, y se embarca en la misión personal de protegerla mientras ésta intenta destruir el Ildatch. Son tramas que suceden de forma paralela, algo común en las novelas de Terry Brooks, por lo que sabremos qué ocurre en todo momento con cada uno de los hermanos. Ambos toman caminos diferentes pero destinados a un único fin y destino. 

Por un lado, tenemos una línea argumental que sigue el camino de Allanon, Brin, y Rose Leah, a los que se unirán nuevos personajes en el transcurso de la historia. Durante la misión, Allanon tratará de instruir a Brin en el uso de su magia, pero siendo receloso en cuanto a un secreto de suma importancia para la trama en su conjunto, algo que nos mantendrá con la mosca detrás de la oreja.

Y, por otro lado, tenemos a Jair, que emprende su propio viaje junto a Garet Jax, Edain Elessendil, Helt, entre otros. Su aventura estará plagada de emoción y persecuciones casi a cada paso, sin tiempo para el respiro, haciendo que estos capítulo sean igual o más emocionantes que los del otro grupo. La trama de Brin tiene mayor peso argumental, al ser quien debe destruir el libro y evitar el fin del mundo, pero es mucho más pausada y en ocasiones se hace algo lenta y reiterativa, sobre todo en lo que respecta a la negación continua de Brin en aceptar como verdad todo lo que le cuentan. Aún así, me ha gustado que se le haya dado mayor movimiento a la historia del hermano, tratando de equilibrar un poco el protagonismo e importancia por medio de la acción y los peligros paralelos a la misión principal.

El desenlace es intenso y lleno de emociones, con muertes que me han tocado la fibra sensible al tratarse de personajes queridos o que se han hecho querer. Además, la pluma de Terry Brooks es directa y sin tapujos, relatando los hechos muy vívida y visualmente, por lo que esos momento son de angustia total. pero, como bien se va evidenciando conforme se avanza en la lectura: es el nacimiento de una nueva era en Shannara y, por tanto, hay que empezar de cero...

En resumen, 'La Canción de Shannara' es un libro intenso, lleno de acción, emoción y peligros, con unos personajes fuertes y decididos, y con una trama que se bifurca y nos permite viajar de la mano de Brin y Jair en pos de una misión que puede decidir el fin de la humanidad o el comienzo de una nueva era. Un libro que recomiendo si eres un apasionado de la fantasía épica. Además, pese a formar parte de una trilogía, se puede leer como si fuera libro único y autoconclusivo.