Reseña: 'El Pacto' de Michelle Richmond

Título: El Pacto
Autora: Michelle Richmond
Editorial: Maeva
Páginas: 424
ISBN: 978-84-17108-49-6

Si una institución garantizara que tu matrimonio durará para siempre, ¿te inscribirías sin conocer la letra pequeña?
Alice y Jack son la pareja perfecta. Alice, que antes era cantante en una conocida banda de rock, es ahora una exitosa abogada. Jack es terapeuta de adolescentes y parejas. Cuando están a punto de casarse, reciben un regalo de boda muy tentador de parte de un cliente de Alice. Se trata de una invitación para entrar en El Pacto, una sociedad secreta cuyo cometido es garantizar que su relación dure para siempre. La mayoría de las reglas del manual parecen muy simples y lógicas, y como su historia de amor es lo más importante para ambos, aceptan alegremente la invitación. Enseguida se dejan seducir por fiestas lujosas, nuevos amigos, aventuras y sorpresas. Cuando la pareja empieza a recibir castigos, cada vez más severos, Jack intuye que El Pacto encierra una parte siniestra. Pero las reglas son muy estrictas: deben pertenecer fieles al Pacto y a su matrimonio, hasta que la muerte los separe…

El Pacto es un thriller original que aborda el tema de las sectas desde una perspectiva nueva y diferente, haciendo uso de la unión matrimonial para introducir elementos propios de las sectas como el interés mutuo, la persecución de un fin, la figura de un líder, la construcción de una jerarquía y requisitos para poder formar parte... Todo está muy bien plasmado y destaca por el denominador común y natural de toda secta: una vez que se entra es imposible salir.

Alice y Jack son una pareja de recién casado que, en el día de su boda, reciben como regalo de uno de los invitados la posibilidad de pasar a formar parte de un club selecto de parejas unidas en matrimonio llamado El Pacto, donde todos sus miembros trabajan para conseguir el mismo fin: que su matrimonio dure para siempre. Jack y Alice lo ven como un juego y como una forma diferente de reforzar la relación y los sentimientos, sobre todo Jack, que lo percibe como la posibilidad de asegurar que Alice, que siempre ha sido un espíritu libre, centre su vida y su futuro en su marido; y terminan aceptado formar parte de él. Al principio todo parece normal, conocen a los demás miembros de El Pacto, asisten a fiestas y eventos, reciben regalos... pero pronto descubrirán que nada es lo que parece. El Pacto se rige por unas pautas de conducta, un manual de comportamiento que todos los miembros deben seguir a rajatabla y que de incumplirse acarrea todo tipo de sanciones y castigos. ¿Qué harán Alice y Jack cuando descubran de verdad dónde se han metido? ¿Podrán abandonar El Pacto sin correr peligro? ¿Sobrevivirá su matrimonio?

La premisa de esta novela es de lo más original, haciendo uso del concepto de secta para trasladarlo al plano del matrimonio. Toda pareja de recién casados busca y desea que su relación de pareja dure para siempre, siendo felices y compartiendo complicidad y emociones en todo momento. ¿Quién no se sentiría atraído por la idea de que un grupo de personas te ayuden a conseguir ese objetivo? De entrada El Pacto viene acompañado por normas sencillas, lógicas y sanas como, por ejemplo, ser fiel a tu pareja, sorprenderle con regalos mensuales, hacer escapadas de pareja cada cierto tiempo, etc. Son condiciones que a simple vista ayudan a que una relación de pareja se mantenga activa y no haya dejadez por ninguna de las partes. La cosa se complica, en cambio, cuando la vida cotidiana aprieta y el trabajo y otras cuestiones ordinarias hacen que a nuestros protagonistas se les olviden esos pequeños detalles, entrando El Pacto en escena para imponer los castigos y sanciones correspondientes.

El Pacto es una sociedad secreta que se rige por su propia ley y código de conducta. Todo está regulado por escrito, y la primera y principal obligación de las parejas en cuanto entran a formar parte de ella es la de leer el manual y prometer su cumplimiento. En él se especifican los motivos del nacimiento de El Pacto, quién lo creó, la finalidad para la que se creó, las normas que se han de cumplir y, sobre todo, las sanciones por incumplimiento, el apartado de mayor grosor. La primera sanción tiene su atenuante pero, si eres reincidente, las sanciones van variando de leves a graves y muy graves, según el grado de la infracción, y el castigo impuesto va en consonancia, siendo superior y peor a medida que se van acumulando e incrementando en grado.
La verdad es que este apartado me ha resultado muy curioso y atrayente, sobre todo por deformación profesional, y ha sido interesante conocer la jerarquía de la sociedad y cómo imponen el sistema judicial y llevan a cabo los juicios, las condenas y la rehabilitación de los acusados.

La trama está narrada desde el punto de vista de Jack y es otro aspecto que también me ha llamado la atención pues creo que la trama daba pie a la posibilidad de dos narradores: Alice y Jack. Me hubiese gustado conocer las ideas de cada uno con respecto a El Pacto y cómo hacen frente a las diferentes sanciones que le imponen, lo que piensan en cada momento, el miedo que sienten, la sensación que les embriaga de están volviéndose locos,... Pero solo conocemos la postura de Jack y, al principio, me pareció que la trama cojeaba en ese aspecto. Sin embargo, conforme vamos llegando al final, entendemos el por qué de que la autora se haya centrado únicamente en reflejar la perspectiva de Jack y dejar con la duda en el lector hasta el final. Ha sido una buena jugada.

Jack es el personaje que conocemos más a fondo y posee una personalidad totalmente contraria a Alice. Jack es la figura activa, aquel que intentará por todos los medios encontrar la salida a El Pacto, hecho que cabreará a los miembros de la sociedad y los pondrá en el punto de mira. Alice, por otro lado, pese a venir de una juventud caracterizada por no atarse a nadie y disfrutar el momento encima de un escenario con su grupo de música, tras casarse y entrar en El Pacto, se vuelve más conformista y adaptable a la situación, aceptando cualquier sanción sin cuestionarse nada más. Su único deseo es que su matrimonio funcione y está dispuesta a cumplir a rajatabla todo lo que El Pacto diga y exija, por muy cruel o vejatorio que sea.
Además, otro aspecto que me ha gustado de Jack es que trabaja como psicólogo y en su consulta suele atender a parejas con problemas matrimoniales, recurriendo así a sus experiencias en ese sector para darle sentido a lo que está viviendo y, sobre todo, para contrastar y cotejar las situaciones de sus pacientes con las de su propio matrimonio, tratando también de llevar a su práctica los consejos que da en consulta.

El ritmo de la historia es más bien lento pero continuado. Los capítulos son muy breves y siempre terminan en el momento justo para que te den ganas de seguir leyendo un poquito más. Michelle Richmond ha sabido crear una atmósfera que atrapa y que se va volviendo cada vez más asfixiante y adictiva y, sin duda alguna, tiene la calidad para ser un guión de película, al contener una mezcla entre narración y diálogos de lo más visual y práctica (Tengo entendido que ya hay derechos comprados para hacer la película).
El final tiene su intríngulis. Os aseguro que no lo veréis venir y os dejará con la mosca detrás de la oreja. Una de esos desenlaces que dejan la mente abierta a más de una posible interpretación.

En definitiva, 'El Pacto' es un thriller psicológico original y diferente que juega con el deseo de toda pareja que contrae matrimonio: conseguir que su relación y felicidad duren toda la vida. Partiendo de esa premisa, Michelle Richmond nos introduce en una sociedad secreta que se mueve en su propia línea de lo moral y lo justo, siendo juez y verdugo de todas aquellas parejas que no cumpla ni colaboren con el objetivo común de la sociedad. Pronto nos veremos atrapados en una atmósfera asfixiante y adictiva de cara a todo por lo que tienen que pasar nuestros protagonistas para cumplir con las obligaciones de El Pacto y evitar castigos mayores.

- Gracias a la editorial por el ejemplar -