Reseña: 'La Torre Prohibida' de Ángel Gutiérrez y David Zurdo

Título: La Torre Prohibida

Autor: Ángel Gutiérrez y David Zurdo

Editorial: Minotauro

Páginas: 331

ISBN: 9788445000137

Tras sufrir un accidente que casi acaba con su vida y que le ha provocado una pérdida total de la memoria, Jack Winger ingresa en una clínica de reposo para recuperarse de las graves secuelas. Allí le explicarán que era periodista de sucesos, que nadie le ha visitado en el hospital y que todos los internos padecen amnesia. Lo que nadie le contará es que todos los enfermos sufren pesadillas recurrentes, sueños terribles que se repiten cada noche. Ni que a veces el enfermero jefe se lleva a un interno al bosque pero vuelve solo, ni que existe una torre cuya entrada permanece oculta y a la que no les está permitido entrar...

Con la ayuda de Julia, una joven paciente cuya pesadilla es, si cabe, mucho más terrible que la suya, Jack descubrirá que hay lugares en los que es mejor no internarse, y que algunos secretos deberían permanecer ocultos para siempre.

'La torre prohibida' ganó el Premio Minotauro 2012 y desde su lanzamiento he tenido muchísimas ganas de descubrir el mundo de misterio y terror con el que le daban tanta publicidad.

La narración de la novela se desarrolla en dos tiempos. Al principio parece bastante claro cuál es el pasado y cuál el presente de la historia, aunque conforme se avanza en la lectura... ya no parece tan claro y es lo que más ha despertado mi interés. Se alternan los capítulos teniendo como enfoque dos escenarios diferentes, desvelándonos a cuenta gotas una historia rodeada de un auténtico halo de extrañeza y oscuridad que hipnotiza de principio a fin.

En los capítulos impares, conocemos a Jack Winger, un periodista de sucesos que vive felizmente casado con una esposa a la que adora y con la que tiene un hijo al que venera. Pero hay un vacío en su mente que nubla toda la normalidad de su vida y que no es capaz de rellenar. Antes de ser periodista de sucesos fue corresponsal de guerra en Níger y fue testigo del asesinato de una joven nigeriana de la mano de Kyle Atterton, el hijo de un poderoso empresario que logró salir impune comprando su libertad. Ese suceso le llevó hasta una situación límite, afectando a su salud, y de la cual aún no ha conseguido sobreponerse del todo, al menos eso es lo que muestran los recientes acontecimientos a los que no logra darle una explicación lógica. ¿Su mente le vuelve a jugar una mala pasada?

En los capítulos pares, nos adentramos con Jack en una clínica de reposo a la que ha decidido ingresar para recuperarse de las secuelas que le ha dejado un grave accidente que ha tenido, aunque en ningún momento se explica exactamente qué tipo de accidente tuvo, por qué no viene a verle ningún familiar, por qué no recuerda nada de su pasado, a qué se debe la repetida pesadilla que le atormentar por la noche en sueños... Muchas preguntas que, debido a su profesión de periodista, no podrá dejar en el olvido, moviéndole a descubrir junto con Julia, otra paciente de la clínica, las respuestas a todas esas preguntas y muchas más: ¿Por qué todos los pacientes de la clínica tienen amnesia? ¿Por qué todos tienen pesadillas cuando se van a dormir? ¿Por qué no pueden abandonar ese lugar?...

El punto que más destaco del libro es la atmósfera de extrañeza e inquietud que se respira en cada una de sus páginas, en cómo los autores saben llevarnos como cogidos de la mano a través de su escritura, introduciéndonos con una habilidad sorprendente en un pozo de hechos y giros inesperados en los que caemos de bruces como el propio protagonista. En ningún momento sabemos o intuimos más que el propio Jack, sumiéndonos en el mismo mar de dudas y miedos que él.
En más de una ocasión me he dicho: 'Ya sé por dónde va la trama. ¡Sí, sí, es lo que pienso, ya he descubierto el quid!', para tres páginas después decir: 'Ah, pues no' xD. No sabes claramente lo que ocurre hasta que los autores te lo desvelan al final. 

La idea que más me rondó por la cabeza sobre el posible final de la historia fue finalmente la que tuvo lugar, pero 'La torre prohibida' está escrita de una forma que hace que te cuestiones todas las posibilidades que te planteas en tu cabeza tanto como Jack, haciéndote dudar de cada hecho probable, hasta que lees los últimos capítulos y saltas: '¡Serán *insertar insulto cariñoso xD*! ¡Con qué habilidad me han dorado la píldora para poner en tela de juicio todo lo que se pasaba por mi mente y que al final sea lo que yo pensaba!'. Algo sin duda alguna que aplaudo sin cansar: la forma en que Ángel Gutiérrez y David Zurdo han sabido llevar todo el entramado angustioso y claustrofóbico de una trama donde nada es lo que parece y donde solo los autores conocen el punto y final.

Como ya he dicho han habido varios momentos en la historia donde estaba totalmente segura de haber descubierto el desenlace de la misma, pese a las semillas de dudas que los autores han sabido dejar a cada paso. Aún así, sólo conseguí arañar la superficie de lo que verdaderamente ocurre y lo que había detrás... ¡Vaya si me sorprendió!

Los capítulos son cortos y eso agiliza la lectura. Cada capítulo termina en el punto exacto y con las palabras justas para engancharte al siguiente y así no dejar de leer. Y la forma de narrar de cada autor ha conseguido angustiarme, asfixiarme y temblar, no tanto de miedo, sino de la atmósfera que se transmite en cada párrafo: esas dudas y preguntas de los personajes que se convierten en propias.

'La Torre Prohibida' es un thriller que compagina el terror psicológico, la fantasía y lo paranormal de forma sorprendente. Te sentirás en la piel de su protagonista y te plantearás las mil y una cuestiones que recorren su mente. Con un final que verás venir pero que, aún así, no esperarás.